Rafael Blanco

VALENCIA LACERADA

 

 

Los he visto marchar uno tras otro

En fila india armados de herramientas y en silencio

Tal vez atragantados de dolor

Ante la aflicción propia o ajena

 

El barro de la tragedia esconde sus rostros angustiados

No es humano el sufrimiento

No puede serlo ante el cadáver del hermano

No puede serlo ante el amigo que ya no está

 

Todos ayudan…

Son pocas y muchas las manos que trabajan

El hambre no hace mella

Solo importa abrazar con desespero la esperanza

 

Desgarran sus gargantas ante gritos impotentes

Que ruegan por sus padres, hermanos o hijos inocentes

Pues la vida se ha marchado

Y se ha hecho reina en su trono de corrientes persistentes

 

Nadie esperaba el cataclismo hecho lluvia

Fue un soplo de muerte escondido entre las nubes

Cual castigo divino inesperado

Arrasó con todo lo bello de la vida

 

Y habrá de pasar el tiempo del lamento

Y que se yo… tal vez un día todo vuelva a la existencia

Pero hoy se llora en los caminos de VALENCIA

Y sus bellos campanarios llaman sin cesar a la conciencia

 

Volverán los días de jolgorio

Y en sus playas y mercados no habrá campo a la tristeza

Porque juntos como pueblo que resiste

Avanzaran unidos al encuentro de la luz

Que se apagó un día en el camino de la vida.

 

Rafael Blanco López

Nov. 2024