\"BORBÓN\"
Un muñeco de ventrílocuo, que vende su corazón barato y desairado…
Camina en soledad, con sus cuerdas colgantes, por amigas burbujas…
Y un viejo duende gruñón y deforme, por amigo… Quizás los cascabeles que gimen de espanto y dolor, vibran al raz del tango y el sudor de marionetas perdidas entre sí…
Títeres, titiritean sobre payasos enamorados… Aplaude el mimo, que llora por no decir lo que siente, a su muñeca de trapo, que, frágil y sensible, absorbe su indiferente belleza y lo desahoga en algún palco de mala muerte…
El muñeco que destruye sus ilusiones, por edificar nuevos traumas sonrientes, quizás así no siente ni demuestra su acallada tristeza…
Es incómodo dormir sobre paja sin rodar y un pecho sin latir… ¡Cuán quisiera el muñeco de ventrílocuo, polvoriento y lagrimoso, volver a tener la pureza de antes! Que huyó despavorido y murió tan…\"