La luna está disgustada
con una mariposa alegre
por posarse en la corola
del clavel que en tu ventana
disfraza con esencia roja
la monótona pintura,
desconchada con premura,
de tu aburrida fachada.
Las alas coloreadas
con pigmentos ideales,
dibujaron con su sombra
en tus oscuros cristales,
un corazón de colores,
negros azules y rojos
que son de seda anteojos
para ojear tus labores.
¡ La luna está confundida,
los ojos que te miraron
desde el clavel solitario,
fueron mis ojos prestados
a la tierna mariposa
para poder contemplarte
sin que la luna envidiosa
pudiera mi amor robarme.
JOSE ANTONIO GARCIA CALVO