Freddy Kalvo

La gema de mi joyero

 

Decir que la quiero es poco,

decir que la extraño… ¡mucho!,

pensar que su voz no escucho

me vuelve per se, muy loco.

 

Me inquieto si no la toco;

conmigo mismo, yo lucho,

me voy poniendo flacucho

y con mis versos la invoco.

 

Quisiera que me quisiera

así como yo la quiero;

quisiera que ella viniera

 

al lecho donde la espero

en donde siempre la espera

la gema de mi joyero.