S U P E R A C I Ó N
Nuevo horizonte se abrió,
cuando tu vida a la mía llegó;
¡Que bello suceder!
Mejor no podía ser.
Abriste nueva visión,
haces latir fuerte el corazón;
¡Que bello palpitar!
E intenso deseo de amar.
Ave fénix, aprendida a surgir,
de cenizas a nuevo porvenir.
¡Es leal proceder!
Buscar lo que quieres ser.
Sabes, que disfruto el honor,
tenerte en mi regazo soñador.
¿Soy invicto ganador!
Agradecido estoy al Creador.
Adiós, adiós di a la inercia,
adiós, adiós postergación.
Ahora y por siempre,
mi fénix, te llamas, superación.
Roberto D. Yoro
Olanchito, Yoro,
Honduras C.A.