La luna mira aterrada
pateras de la tortura
navegando en mar de altura
con la muerte traicionera,
buscando la primavera
donde enterrar la pobreza,
las guerras y la bajeza,
de una sociedad perversa
donde a los perros se salvan
y a los humanos se cuelgan.
La noche toca la lira
cantándole la mentira al mar
que tornase verdugo inocente,
pues el insoportable yugo
que ahoga al indigente
no es la marea creciente
y si las olas de un mundo,
moribundo y codicioso,
que hace a los hombres ser mudos
muñecos de los poderosos.
¡ La luna mira aterrada
las balsas de la tortura ¡
JOSE ANTONIO GARCIA CALVO