Fuiste mi pasado hermoso.
Ahora quiero encontrarte en el presente,
con amor cariño y, recordar esos
bellos momentos en ese ocaso de
playa o en mi alcoba, con esas luces
casi encendidas y, tú con tu cuerpo
ardiente, yo con el mío amándonos tiernamente. Hay si tu vinieras en una
tarde de ocaso qué bonito fuera porque,
aún lo llevo en mi pecho dulcemente
y, de seguro que llegará la aurora,
el rayo de sol lo despertara alegremente.