A anabel.
You just know.
Du wisst nur auf mein lieb.
Ya no he escrito tanto, de hecho creo que ahora tú escribes más que yo. Pero en estos momentos de desolación y falta de ternura donde sobra la arrogancia y perdura el recuerdo, aquella pequeña rosa que plantamos en verano es más fuerte a veces que nosotros, no por el hecho de aguantar encima de sus petalos las pocas gotas que se mantienen como guerreros espartános ni por las miles de caricias que plasma tu hermanita (que no la conozco muy bien) por la noches, sino por el hecho de que aún sigue ahí, sin embargo nosotros no podemos mantenernos. Todo es tan diferente entre nosotros dos: Yo la filosofía, tú el derecho, nuestros libros, las ideas religiosas y el concepto de fe (parte vital de algunas charlas), y por si fuera poco la manera de escribir. Quiero entender todo lo que imagino al irme de tu lado, mantener firme y sin titubeos la idea de dejarte en tu casa después de la tormenta de un domingo por la tarde. Ahora creo que fue importante el hablar del humo y los cigarros, ese humo que vistió los dias de aquellos momentos con un nombre que sólo nosotros conocemos.
tú alma van más allá que un motor inmovil o algo superior a eso; eres el ápeiros de anaximandro, lo infinito y lo ilimitado.