Con prolija lentitud vana,
negra de cuervas suma, ruda,
breve al gusto escondes lisonja,
te detienes en tu soberbia
misma, inepta Política.
Ya tarde arrepentida e incierta,
el humano derecho apenas,
y el divino los interpretas,
los ofendes con graves cargas.
Juventud valerosa, capaz,
contra el viento en desigual lucha,
muros de piedra y rocas alza.
Así la juventud cansada,
por la agreste, fragosa cuerda
del camino, forjadas treguas
son duras cuerdas de las negras
guijas en lucientes clavijas
de marfil, merced de la dureza,
que su duro camino ha forjado.