Para que el amor fluya
no debe haber desconfianza,
porque nunca se logrará
el fiel de la balanza.
la duda trae desconfianza
y contra el amor conspira,
creando un ambiente tan tenso
que el aire no se respira.
Si hay duda y desconfianza
no habrá quien se respete
y será difícil cumplir
todo lo que se promete.
En el amor se juega limpio
sin segundas intenciones,
porque la duda es dañina
y enferma los corazones.
En el amor se debe cubrir
con las buenas intenciones,
para evitar que surjan
las dudas y las traiciones.
Si hay duda hay desconfianza
el amor se va alejando,
porque nadie aceptaría
que con él estén jugando.
Alejandro Díaz Quero
Villa de Cura,01/11/2024.