La pena;
que desprende el alba,
al llorar rocío
de luna.
Lleva tu mirada
buscando una estrella,
que acuna
tu sentir alegre
de tener tus pétalos.
Fortuna
que sí encontré
en tu bello rostro,
cual pruna
que tersa aparece
detrás de la bruma,
bendecir el día
como el rayo aúlla,
que con su tormenta
impone y asusta.
Tranquila la aurora
enseña el camino
que por su ribera
florece el espino
que junto a la jara
ofrece el destino
de buscar el agua.
Dar gracias a los cielos
que vierte vida,
y el agua del terreno
es absorbida.
Celebrar con la lluvia
mira que suerte
lavar tu linda cara
en la vertiente.
Roberto J. Martín