La tarde está silenciosa y dormida
amigo cantinero sírvame un trago
un vino añejo, aunque sea amargo
quiero brindar por mi alma perdida.
Tú no me conoces ni yo te conozco
pero brindemos ahora soy tu amigo
quiero ahogar mi pena en un trago
quiero hundirme en el pozo del olvido.
Te platico amigo cantinero
que quiero arrancarme la vida
vivir para mí ya no tiene sentido
soy un paria en el paraíso del amor.
Yo la amaba mi buen amigo
por ella me arranco la piel a zarpazos
por ella me entrego a la muerte
pues la amo más allá de la muerte.
Con ella pasé los momentos más bellos
besé sus labios y acaricié su piel
fundí mi alma en su alma
y mi cuerpo en su cuerpo.
Pero aquí viene mi desgracia
cuando más nos amábamos
un maldito borracho al volante
arrancó la vida de mi amada.
Hoy divago por la vida
como un pelele sin valor
sin ella para qué vivir
sin ella sólo me queda morir-
Lima, noviembre 25 del 2024
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