Te amo tanto, eres mi dulce temor, como un sol que teme perder su calor.
Tu abrazo sella mi vida, pero el miedo me abraza en una fría tentación.
Eres luz, aquella razón de mi ser, en tus ojos encuentro mi hogar y mi fe.
Quisiera sellar este amor con pasión, tenerte en mis días eternamente.
Porque sin ti, el mundo se vuelve gris, mi corazón grita ¡no me dejes ir!
Florcristal...