Ella ya nada esperaba
sólo se conformaba con ver
en paz un nuevo atardecer
y cerrando sus ojos sentir
a la brisa queriendole...
Nadie podría entenderle,
de saber la verdad;
como explicarles a los cuerdos
el despertar como mujer,
tantas sensaciones adormecidas en su ser...
Su cuerpo se estremecía todo
desde la cabeza a sus pies,
la piel errizada,
los pechos turgentes
y hasta su boca se dejaba
vencer al oculto placer...
Secreto bien guardado
entre ella y él
pues quien diría que aquel viento
sería el recuerdo de su amante fiel...
Locura....placer....
quien no quisiera entrar en este juego,
torbellino de sensaciones,
por favor se los pido,
si ven a una mujer sóla con ojos cerrados
sonreir, sonrrojarse y sus labios morder
no la molesten, no la despierten....
Sólo está dejándose querer...
Sólo está siendo mujer....
ESMERALDA