El sol se ha ido, ya cayó la noche,
Nuestros fuertes campesinos
Se quitan la dura coraza,
Tienen las manos hinchadas
y la espalda destrozada,
El sudor impregnado en sus frentes,
Hace que el coraje se quede entre dientes,
Aunque usaron diferentes herramientas,
Y fueron muchos los productos que sembraron
No solo son la mano de obra pagada,
Son la mano de obra obligada.
No pudieron cargar su mochila
Ni pudieron aprender a escribir,
No lograron conocer una escuela
Los obligaron a trabajar bajo el sol
Son esclavos de las necesidades,
Son niños carentes de recursos,
Que crecieron bajo mucho rigor.
Se aferraron a sus habilidades,
Su fuerza de trabajo les da de comer.
Son sombras de la sociedad.
Pies descalzos sin poder caminar.