Se apaga noviembre
Se apaga noviembre, el viento suspira
entre hojas caídas y promesas rotas,
un manto de hojarasca se desboca
en la senda que a enamorados inspira
a soñar con el sol que ya no brilla
y se oculta tras las nubes que tiritan
de frío y su espejo en el rio palpita.
Los días se acortan, la luz se marchita,
las sombras se alargan, el céfiro viento
vibrando agita las frutos que yacen
perdidos en el campo, como olvidados,
sueños recuerdan el amor apagado.
Así, entre sombras, el fresco aire avanza,
pero en cada adiós resurge la esperanza.
Que noviembre se apague, es un canto
a la vida, y al final hay un nuevo encanto.