JUSTO ALDÚ

LA LUNA YA SE DURMIÓ, LAURITA

 

 

 

Hoy la luna se arropa en su manto,
ha callado su canto al sentir tu adiós,
y las estrellas, con un suave quebranto,
te despiden en luces, guiando tu voz.

 

Tus versos, Laurita, tejidos de encanto,
dibujan paisajes de rima y amor,
y aunque el silencio ahora cubre tu canto,
tu esencia se queda, eterna y mayor.

 

El viento murmura tus frases aladas,
las lleva bailando sobre el mundo entero,
y en cada poema, tus huellas marcadas
resplandecen vivas, puro derrotero.

 

La noche, tu amiga, suspira en tristeza,
se acuna en tus letras buscando calor,
y el cielo, llorando con delicadeza,
guarda tus palabras con un gran dolor.

 

La luna ya duerme, Laurita querida,
más tu luz persiste, jamás morirá,
pues eres poema, la voz de la vida,
un faro que siempre nos alumbrará.

 

Justo Aldú

Panameño

Derechos reservados © noviembre 2024