Asi como un día llegó, tambien se marchó, porque qué razón tiene la suerte para permanecer insatisfecha.
Ella humilde y sencilla, no presumia pero premiado quien tiene la dicha de recibirla en su vida, pues al fin y al cabo todos deseaban a la suerte eterna.
Su gran entrada; siempre la puerta trasera, pero eso no era importante ni le robaba protagonismo pues su valor lo sabia solo ella.
La suerte llega sin invitación y sin saber la razón, pero un dia la suerte despierta.
Despierta abrumada e insatisfecha, sus sueños eran solo sueños, y lo mas triste solo eran de ella.
Cansada de vivir esperando ser mas que suerte decide viajar lejos y volverse ilesa.
Ya la suerte no da suerte, ya la suerte es solo de ella.