Te amo en el suspiro del alba,
cuando el mundo despierta despacio,
y el sol acaricia los campos
con su luz de oro y abrazo.
Te amo en el canto del viento,
que danza en las hojas del árbol,
y en el murmullo del río
que guarda secretos callados.
Te amo cuando el mediodía
extiende su manto brillante,
y el cielo se pinta de azul,
tan alto, tan puro, tan grande.
Te amo cuando la tarde
se viste de fuego y coral,
cuando el día despide su luz
con un beso al horizonte final.
Y al llegar la dulce penumbra,
cuando el sol se oculta en su lecho,
te amo aún más, en silencio,
porque eres mi último pensamiento.