José Luis Silva-Díaz

El Bohío

El Bohío

 

Dijo Abbad que al pie del altozano

“levantaré un palacio entre los mejores”

y cobijado entre yaguas a lo largo del rio

nació el bohio de sus mil amores.

 

Habló Virgilio de su visión galana

de las mozas que su bohio lucía

Primula Venus entre las rosas

en bellas tardes cuando el sol ardía.

 

Refugio en la noche fue para Marti

símbolo de patria y de su grandeza

del campo verde el precioso encaje

y del yucayeque su Fortaleza.

 

Sus postes hincados de madera pobre

valieron más que vigas de marfil

y el techo desmadejado de hojas nobles

pusieron en poco los cristales de Marquis.

 

Bella casucha destartalada

con techo de paja y piso de tierra

tus hojas de palma en varas atadas

entrelazan el alma de quien te aprecia.

 

©Jose Luis Silva-Diaz