Asomado a la ventana
Viento fresco me acaricia
Para librar telarañas.
Sin los tapujos del día
Atisbo las menudencias
Y vislumbro otras tendencias.
Despertando poco a poco,
Compruebo las resistencias
De viejas rutinas necias.
No puedo evitar asombros
Por continuadas ausencias,
Por las penosas presencias.
Pero, me acucian preguntas
Sobre las propias secuencias
En candentes circunstancias.
Se mezclan tensas argumentaciones
Donde acuden veloces preferencias
Y no siempre mirando consecuencias.
Cuando valoro cerrar la ventana
Atiendo sobre todo a las carencias,
Pero, vencen mejores apetencias.