Tu amor que actualmente crece y tu afán por nuestro encuentro
satura de conjeturas a tu pensamiento en su rebeldía;
yo, hoy sujeto manos de personas de fuera, por no amarnos;
tú, contienes la avidez que está latentemente en ti,
así concretas mil maneras de soslayar los celos,
y en el acto te percibo atrayendo mis atenciones,
¿cuando por fin uniremos nuestros universos?,
¿quieres que seamos amigos?, no puede ser,
si te amo y me amas debemos soportar dilaciones
hasta el día que sea yo solamente para ti y tú seas mi mujer.