Me atrevo a decir,
Exclamo al viento,
El susurro desaparece:
¿hay alguien ahí?
Mis voces no las oyen
La encrucijada me ahoga,
Algo pierde la órbita,
Los clamores se superponen,
Y yo, no estoy solo.
Sin sobresaltos.
Los discursos se corrompen,
Los oídos desoyen.
Tras el muro, el lamento,
Dentro, nada fluye,
Nada en el encuentro,
La fuerza pierde el centro de
Gravedad de este cuento
¡Ya puedo decir!: mi fuerza perdura imprecisa