CORAZÓN SANGRANTE
El corazón también sangra.
De la emoción contenida.
De los sueños que se escapan.
Los amores que se evitan.
Y de las vidas que pasan.
Por encima de otras vidas.
Invierno de amaneceres.
Sí, se enfría el sentimiento.
Y los preciosos momentos.
Se diluyen en la brisa.
Quedándose los placeres.
Al socaire de los hielos.
Sangra el corazón, sí, siente.
Que los latidos, terminen.
Que, los hálitos del verbo.
Sucumben ante la vida.
Y se hielan los misterios.
Que entre los sueños pululan.
El corazón también sangra.
Sí, se secan los recuerdos.
Y en residuos se convierten.
Los amores que se fueron.
Cuando las palabras dañan.
Y se queman los ¡Te quiero!
Helados quedan los sueños.
Si el frío hiela los huesos.
Los que en el amor se crean.
Con caricias y con besos.
De cristal, se vuelve el verbo.
Como vasijas, se quiebran.
En las venas se transportan.
Los heladores deseos.
Sangre que enfría las ganas.
De sobrevivir sin frenos.
Heladora la sonrisa.
Que, falsamente, se plasma.
También sangra el corazón.
Cuando la pasión se acaba.
Ángel L. Pérez ®
SOY LO QUE ESCRIBO Y LO QUE TÚ SIENTES AL LEERME
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08/12/2024