AL LOCUTOR
Cuando te sientes solo y afligido,
ahí está contigo, la voz del consuelo,
arrullándonos, con su mensaje,
¡oh! gracias, amigo locutor de la radio.
Cuando el día que empieza es sombrío,
surge desde el micrófono de la fe,
el hombre, que transmite esperanzas,
de que todo no es malo, en esta vida.
El locutor educa y habla con la verdad,
una cualidad innata y no es profesional,
haciendo felices, a los que lo escuchan,
una alianza comunicativa, con los oyentes.
Honor y gloria al profesor Nel Ponte G.,
y a todos los que partieron al más allá,
dejando escuela y decencia en la tierra,
¡oh! gracias por acompañarnos en el día a día.
Vamos felices, ingresando a los hogares,
expresando una palabra de aliento y ánimo,
compartiendo lindas melodías de siempre,
para disfrutarlo, aunque sea por una hora.
Valoremos siempre, a los hombres y mujeres,
que sacrifican su tiempo con pasión y amor,
una vocación de gran valía para las generaciones,
emitiendo noticias, y mensajes para vivir mejor.
AUTOR JUSTO PONTE CRUZ