~ * ~Alma es una jovencita con luz propia y se mete en cada lío cada vez que la luz del alma se enciende y ella sabe cuándo…
Sucesos:
Alma es una joven de apenas quince años de edad y es la joven llamada Alma la que tiene ojos y cabellos de color negro y es apenas una joven llena de ilusiones. Alma es una jovencita dulce y tierna, pero, se mete en cada lío que ni Dios la puede ayudar. Alma es de esas niñas de quince años, por lo cual, se aferra a la idea en creer en la buena suerte, pero, sólo le llega la mala suerte de caer siempre en líos. Alma tiene luz propia y es de esas niñas que la vida se aferra a la idea y brilla con su luz cada vez que se mete en líos y se inmiscuye tanto y tanto en los líos que sale tan dolorida como espantada. La vida de Alma se aterra a la sola idea que el desastre de entrever se da a la mala idea de saber que su único escape es meterse en líos y casi sin salir de ellos. Alma y su vida tiene algunas características, por las cuales, se aferra a la idea en querer morir por caer en líos y muy terribles. Alma siente en su alma una decadencia autónoma siempre en caer en líos y muy consecuentes. La joven de apenas quince años siente como la más desencadenada situación en caer en redención autónoma siempre en los más terribles líos. Las situaciones en las que se mete y se inmiscuye Alma son un desastre para ella cuando en el recelo del alma y con luz propia brilla como toda diva y más como toda artista de cine, pero, en realidad que en los líos en que se mete no les da ni para salir de ese trance directo. Alma quedó como el principio socavando en la sola exasperación en creer en que los líos en que se mete tendrá la salida que ella espera. Las características de Alma para poseer y tener luz propia son número uno, la esencia, número dos, la virtud, número tres, la presencia, número cuatro, la personalidad, número cinco, sus ojos y cabellos negros, número seis, la mirada intensa y número siete, su inteligencia. Éstas siete características son para Alma la esencia más frívola de creer en el trance perfecto en una sola señal para meterse en líos con luz propia. La señal siempre será que se le prende el bombillo de luz en la cabeza con su sola poca inteligencia que se le otorga en una señal para seguir hacia adelante. Alma quedó con luz propia y con la vida hecha fortuna cuando en el afán de creer en el comienzo de su fructífera vida quedó con luz propia acechando todo su camino con luz propia. La vida de Alma quedó con la luz que emana desde su interior socavando muy dentro de su imaginación poder llegar con luz propia hacia su propio destino y así fue. Alma quedó como la órbita atrapando luz, fuerza y voluntad desde que el destino se aferró al deseo frívolo de obtener una fuerza sin deterioro eficaz en su corta vida y por una sola existencia marcando el recelo de vida como tormento. La vida de Alma se aferró al frío y al calor dentro de su propio interior cuando ella brilla con luz propia deseando abrir los sesos de virtud, honra y sin un desdoro que atraviesa su vida marcando un frío o un calor desde su propia alma. La vida de Alma quedó fuertemente adherida a esa edad de apenas quince años, por lo cual, se aferra a la idea en poder saber que su mundo es incierto como la edad que posee la jovencita llamada Alma. Alma se aferra a la idea efímera de creer que la luz propia con que ella brilla es opaca y tenue, pero, no, es una fuerte luz con que brilla la jovencita. Alma se encierra a la idea de entrever que la razón se comete en un fuerte derrumbe y en un fuerte desenlace de ver al cielo con la misma luz que va marcando un camino lleno de calor y de recelo vivido. Alma va de camino hacia su propio destino cuando comienza a decaer el fuerte desenlace de creer en el desierto una manera de que con la luz propia que brilla es una luz que viene del cielo o que es de una sola transmutación autónoma de dar con su virtud, creencia y presencia sin la ausente decepción de dar con la pura verdad de que el rumbo se va de la vida y del destino frío cuando ocurre y llega la luz conmísera de dar una sola verdad que comienza a descifrar lo que conlleva una dulce atracción de luz propia desde su alma insistente y tan persistente de caer y meterse en cada lío aferrándose a la idea en poder Alma salir airosa.
Alma va de camino a la faena diaria de su vivir cuando se tropieza en el camino con un narcotraficante del Cartel LTD, el cual, esas iniciales significan ¨Love to Drug¨. Alma no lo conoce ni sabe de él, pero, por la apariencia que lleva ella cree que es un ladrón y no, es el famoso narcotraficante del Cartel LTD. La zona está vigilada con cámaras de seguridad y con todo rifle en las manos sospechadas de éstos hombres que acechan a la zona con el Cartel LTD. El Cartel ¨Love to Drug¨, es un cartel sano no más que es ilegal en lo que trabajan ésos jóvenes sin asesinar a nadie, y su ley número uno es no asesinar a nadie aunque sea un traidor. Para el Cartel LTD la venganza no existe, pues, en el trance de la verdad que la venganza trae más venganza y esa era la regla número uno del Cartel LTD. Alma va de camino hacia su propio destino, cuando de repente, nota que la luz de su interior quiere salir y albergar más luz de la que tiene y posee y ella sabe cuándo hay luz propia para salir a brillar más y más. La luz de Alma quedó adherida a sus propios ojos de luz contemporánea y de luz al acecho de caer en un sólo mal lío que quizás es fuerza y voluntad como la era de creer en el trance directo de creer que la luz sale como salir del interior una fuerza y una luz que atraviesa su cuerpo y más en sus ojos. Alma quedó como el tiempo o como el mal deseando barrer el suelo con la luz que emana y que brilla desde su interior con luz propia. Cuando Alma mira al narcotraficante del Cartel LTD se vio como la fuerza o como la ira atravesando el brillo de luz propia cuando corre en ser como el deseo o como el ir lejos de esa calle cuando en el camino Alma se pierde y llega hasta el Cartel LTD en un peligroso barrio donde la vida y las drogas importan. Alma se vio en la encrucijada de permanecer allí o marcharse lejos cuando vio la cara y más los tatuajes de ese hombre narcotraficante y se asustó como ave que vuela lejos y no sabe cómo regresar a su territorio. El Cartel LTD la vigila de cerca con cámaras de seguridad cuando en el albergue de creer en el camino se aferra a la idea de amar a su propia luz, pero, no, la luz propia de su vida y de su cuerpo la abandona. Alma se mete en un lío feo y tan frío como el camino que cruza ella con buscar la salida en ese barrio peligroso. Alma y su vida se aferra a la idea en sobrevivir como la forma de ver el cielo en cada recelo de la vida atormentado la vida y más la euforia de caer sobre la redención fría de querer amar a la salida de ese barrio tan dominante de calles sin salvación. Alma quedó con la mirada entre los ojos de ese narcotraficante y tan fría como el mismo hielo. Porque cuando en el alma de Alma quedó en color blanco fue cuando en el recelo de la álgida verdad fue tan impoluta en que se mete en ese lío persiguiendo a su vida como si fuera en el pasaje de vida una sola salida en el venidero instante de creer en el tiempo y más en el ocaso frío en caer en ese barrio peligroso donde las vidas están atormentadas. Alma va de camino hacia el mundo y hacia el barrio más peligroso de todos los tiempos y se topa con el narcotraficante del Cartel LTD ¨Love to Drug¨, y se identificó como que se llama Peter R., un peligroso narcotraficante del Cartel LTD y el más dominante de todos los tiempos. Alma y en el camino más ambigüo de todos los barrios se enalteció de forma más adecuada el ir y venir lejos de un mundo y de un barrio casi incierto y el narcotraficante quedó con los ojos grabados de Alma y se ha enamorado de Alma siguiendo y persiguiendo a Alma por todo el barrio consiguió un sólo disparo en el mismo corazón y hasta allí quedó Peter R. muerto por seguir a la mujer de sus sueños y Alma petrificada en ese lío en que se había metido la vida, la insistencia y la persistencia de su corazón quedó como el dolor o como el frío entre sus ojos de mujer perdida por un camino y por un barrio peligroso saliendo cuando la policía llegó a investigar.
Alma regresa a su hogar con luz propia y con fortuna de un infortunio cuando vio a un cadáver caer en el pavimento destrozado con el corazón partido en dos. Si Alma en el venidero mal instante quedó como el tormento o como el ocaso frío en el interior de su hogar. Todo se inmiscuye en el dolor de Alma cuando en el frío verano fue como el dolor de una rosa con espinas zozobrando en el tiempo y como el mismo dolor que siente en su pobre corazón y esa luz propia ha dejado de brillar automatizada con la espera de creer en el alma muerta de un espanto por perder su camino y hallar lo que nunca a un narcotraficante. Cuando Alma en el afán de dar una convidada espera y tan inesperada en el tiempo de ese dolor se ha aferrado a un comienzo y no a un final infructuoso. Alma recostada en su habitación y sin poder olvidar toda la sangre que derramó ese ser y ése hombre llamado Peter R. y que había quedado petrificado en el alma y en la mente como que la sangre brotó como plétora abundante en el alma como en Alma una propia luz en el albergue en querer socavar desde que su alma y en la habitación corrió toda la sangre de ése hombre narcotraficante llamado Peter R. Alma metida en ese lío de una muerte insegura con el narcotraficante se da a la tarea sin poder olvidar el trance directo de dar un sólo olvido sin más ni más. El olvido de Alma quedó sin más ni más como que el deseo se aferró al terrible recuerdo como que el destino es frívolo como álgido es el viento o como el deseo de ver en el cielo aquel atardecer en flavo color recordando el sol y más a la sangre de ése hombre derramada en el suelo por querer borrar de su mente sin poder más ni más olvidar. Si el deleite de Alma en creer en el ocaso frío se dio como lo más pernicioso de todos los malos tiempos cuando en el destino se vio como la impoluta verdad que vio morir a ése hombre llamado Peter R. con un sólo disparo en el corazón dejando en dos a su corazón. Alma y en su alma y a la verdad se vio friolera como la tempestad o como la tormenta álgida en poder recordar la sangre de ése hombre que murió por perseguir la vida de Alma en un barrio tan peligroso. Alma en esa oscura habitación se cuece de un mal tiempo como poder ser el dolor en el alma una sola verdad y tan fría como el tiempo que lleva sintiendo la culpabilidad en su corazón por la muerte de ese narcotraficante del barrio y del Cartel LTD ¨Love to Drug¨. Alma y en su afán en obtener más tranquilidad se aferró a la idea de caer sobre la cama a llorar lágrimas acérrimas y tan ubérrimas en que sólo se petrifica el alma sin la luz propia que brilla en su vida, en su cuerpo y más en esa alma que ahora se siente culpable de una muerte segura en un barrio peligroso y por lo ilegal: la droga. Alma en su hogar quedó como destruyendo la vida y más el mal recuerdo de esa muerte insospechada cuando el Cartel LTD ¨Love to Drug¨ quedó abatido violando una regla o una ley sin asesinar a nadie ni vengar a nadie y desde esa muerte es que se ha violado la ley o la regla de no matar a nadie. Esa regla o ley de barrio se ha roto con la muerte de Peter R. cuando perseguía a Alma por el barrio perdida y para que no le pasara nada malo. Alma y su alma quedó como el deleite en quedar adherida con el dolor en esa terrible habitación donde se mira en el espejo y lo que mira son las lágrimas que corren por su bello rostro, pero, ella se dice -¨¿por qué llorar por un hombre narcotraficante?¨- si su vida atormentó la vida de Alma y de su pobre e insistente alma cuando la luz propia a decaído de luz brillante en su alma y más en su cuerpo desatando la furia de unas lágrimas que solapadas quedan en el intercambio del dolor con la luz propia de su alma.
Alma decide salir de esa oscura habitación cuando corre en el silencio que debe de salir o se va a deprimir más. Alma en el sentido adverso quedó como la seriedad de una sola insistencia cuando en el albergue de creer en el combate de una sola salida Alma decide salir de ese oscuro mal trance. Alma decide ver al cielo como de costumbre y toma la salida hacia otro destino y hacia otro camino cuando se topa y se mete en líos con un ciego. El ciego que decide sin ser vidente y sin ser visible dentro del comienzo y sin tentar a los ojos por los ojos. El ciego que petrifica la osadía en ver por otro sentido se llena de insistencias cuando mira a Alma en el desenfreno autónomo de creer en la tentación y lo que su belleza aflora. Cuando Alma en la forma de dar una sola falta de su belleza autónoma creyó que el ciego la mira y que tiene visión en los ojos. Alma se mete en un lío con el ciego cuando el secreto de ése ciego en su vida sin tener visión, queda como el deseo y como el más inmenso desastre de creer que el viejo tiene visión. Alma se mete en un gran lío cuando el viejo sin visión y ella cree que la mira directamente a sus ojos. Alma quedó como el aire sosegado cuando mira a los ojos del anciano y los ojos del anciano sin visión están y Alma yace en la penumbra de una sola soledad cuando en el tiempo y más en el ocaso se tienta como el aire derribando el ocaso y tentar la manera de creer que posee visión. Porque cuando en el alma de Alma se siente y se percibe como el desafío autónomo de dar una sola salida en cambio de creer en el alma cerrada de espanto Alma mira a los ojos del anciano y sin visión permanece el viejo sentado al lado de Alma en un banco en la plaza del pueblo. Alma se siente como el desafío inerte de creer en el silencio como de costumbre en salvar la manera en una sola eficiente forma de ver al viejo como la visión que no posee. Alma se mete en lío con el ciego cuando el ciego le dice que lo lleve a pasear por la plaza cuando su belleza es como esa plaza con un lago muy hermoso y que su voz calma a cualquier pesar. El anciano loco con la belleza ajena de Alma y enamorado de su voz le explica todo como si tuviera visión y como en el desastre de dar una sola razón abierta, Alma le explica la situación que ha pasado con la muerte de un narcotraficante, el cual, para proteger a Alma muere en el acto en un barrio peligroso por un disparo certero en el corazón deseando defender con el tiempo y más con el recelo de la pura verdad que logró escapar de la realidad cuando en el alma socavó muy dentro de sí. Alma siente en la coraza de su corazón una sola certeza de creer en el alma socavando en el tiempo y más en la culpabilidad de ese silencio que automatizó la espera inesperada de creer en el combate en una sola salida con ese anciano sin visión. Cuando en el alma de Alma se siente como la pura verdad en el silencio socavando en el aire y en la plaza con un aroma natural en la piel de Alma y eso al anciano le agrada y más le expresa que su vida, su piel, su cuerpo y su belleza es tan natural como esa cálida voz que enternece como la aventura de amar en el camino una sola certeza. Y Alma se mete en lío con el anciano sin visión cuando en el tiempo se dedica en amar la naturalidad de su piel, de su cuerpo y más de su voz en belleza innata. Alma quedó como el tiempo y como el recelo de la insistente verdad cuando el anciano sin visión le expresa que su belleza es natural y que su perfume tiene aroma a rosas innatas y que siente el delirio de entrever que la visión es insensata y el delirio es autónomo de creer en el alma una ceguera autónoma en una sola seriedad en el alma muerta de espanto cuando ése viejo y anciano en senectud sin visión la mira fíjamente a los ojos. ¿Qué hace Alma con ese lío del ciego?, pues, el anciano le expresa que es ciego y que no posee visión para admirar su belleza y que no le tema, pues, todo el mundo le tiene miedo a esos ojos que no pestañean. Cuando en el alma de Alma se siente como se percibe cuando corroe el principio o el comienzo de creer en el alma una sola certeza de amar a la senectud como sea. Alma pide disculpas, pues, ella cree en el amor a toda costa y que en el cielo está la belleza aunque el ciego no la pueda ver ni observar. Alma pide excusas por meterse en lío con un ciego cuando en el alma de Alma se siente como la pura verdad de creer que la mira exactamente, pero, el viejo no tiene visión.
Alma con luz propia y desatando una sola insolvencia autónoma siente que la luz de su alma está rota, opaca y tenue, pero, es sólo mal desenlace que tuvo con el ciego. Un hombre ciego que se enamoró de la belleza de Alma y de su voz cálida soltando un soplo de aroma a flores y un hálito desnudo que socavó muy dentro de sí cuando pudo saber que el hombre no la mira sino que no tiene visión. Alma y su lío, pero, en realidad, no fue un lío sino un bochorno de esos en que sólo el ánimo quedó destrozado. El alma de Alma quedó abatida y destrozada en el camino que se dirigía hacia su hogar, cuando de repente, se petrificó el alma en que la luz propia de su alma quedó como el dolor o como el mismo desastre en caer sin luz de su alma hacia el cruel destino. Alma quedó en su oscura habitación como una mojigata creyendo que el viejo ciego se había ofendido, pero, no, no era así. Si Alma en el instante de creer que su mundo se derrumba cuando en el desierto frío se siente como un pasaje de ida y sin regresos cuando en su mundo se siente como el frío cuando en el recelo de la verdad se aferra a la idea de creer que su mundo es como es. Alma y su mundo es como el frío en esa oscura habitación donde el momento se siente como el álgido viento. Alma en su hogar y en esa fría habitación se cuece de verdad y de fríos desconciertos en que la verdad corre como el desafío incierto como el trance directo en un sólo camino corriendo en el trance directo de dar una sola idea cuando arde el temor de ser como el dolor, pero, el lío con el ciego quedó a la deriva cuando en el desván de recuerdos sólo la lleva por el rumbo incierto de creer que vio sangre de un occiso narcotraficante cuando en el alma quedó como el alma desnudando en el alma de fríos y de un sólo desastre. Y Alma recordó que el cielo está con el sol y sin lluvia mojando sus sentidos y con la luz propia de su alma y de su mundo. La luz propia de la jovencita Alma se da cada vez que se mete en líos y es un bochorno o una vergüenza que delate en el corazón buscando en el comienzo una sola mala idea de creer que la luz que brilla por propia voluntad se fue de su alma. El alma de Alma y la luz de su alma quedó como una luz opaca y tan tenue cuando en el trance directo de creer que su alma quedó como el deleite trascendental en una sola luz de su alma. Si Alma en el ocaso y en la noche fría se descubrió la sola verdad de que el frío enterneció la fría bondad en querer solventar una furia o euforia desatando la magia en querer volver y regresar a esa luz que la tenía propia en su alma. Cuando Alma y su dolor por el bochorno o el lío con el ciego en la plaza sólo logró lo que conlleva una sola solución. Si Alma quedó como el dolor o como el trance directo de creer en el alma muerta de un sólo espanto cuando sólo logra la verdad intransigente. Alma y la luz propia de su alma quedó como el ir y venir lejos de la pura realidad cuando en el alma quedó como sospecha de una sola idea de creer en el mundo sin bochornos ni líos en qué meterse cuando sólo la luz quedó como una ira deseando la aventura de dar una luz propia desde su alma.
Alma decide salir de esa oscura habitación cuando por un aprendido error con el hombre ciego se atreve a desafiar la vida y más que eso la poca insistencia de creer en el alma quedó como el desastre de creer en el alma con dolor. Alma por salir de esa oscura habitación se ve fríamente inadecuada cuando en el aire sosegado se atreve a desafiar la forma, la manera de creer en el alma y con luz propia. Alma por salir de esa oscura habitación decidió en cuerpo y alma ver al sol y la idea de dar con una sola verdad de que el encierro en esa oscura habitación le otorga intransigencia autónoma de caer sobre una terrible y cruel depresión. La joven por salir de esa oscura habitación decidió en ser como la luz propia en su propia alma cuando en el afán de creer en la mala situación se dedicó ser como la misma fuerza o como la misma esencia de caer en el trance delictivo en una sola solución al problema de creer que esa luz propia es por Alma meterse en líos. Alma quedó con el destino fugaz y tan fuerte como la ira que siente cada vez que sale su luz propia en caer sobre el silencio en decidir que conlleva una dulce atracción de creer que Alma se mete en problemas y en líos. Alma en el trance de la verdad se creó una sola razón perdida cuando por salir de su hogar quedó con un frío destino y con un hombre sordo, el cual, se vio el recelo de creer en el alma una sola verdad inocua cuando Alma le habla de todo a ése hombre en el parque donde fue a descansar de ese terrible bochorno con el ciego. Alma se fue al parque a ver las gaviotas volar en el lago más hermoso de la ciudad cuando se acerca ella a un hombre sentado en el banco del parque. Alma le cuenta de todo lo que ha acontecido los últimos instantes de su corta existencia con el narcotraficante y con el ciego. Alma se mete en cada lío que no sabe si son líos o son bochornos cuando meterse en líos se aferró a la mala idea de creer en el trance directo de confesar todos sus líos a ése hombre sentado en el banco del parque sucumbiendo en el decreto de haber confesado todos sus líos. El hombre le ciñe las cejas como escuchando todo lo que ella le expresa, pero, que en realidad que es un hombre sordo desde pequeño. El hombre sordo quedó como el inmutado silencio y tan sabio como el tiempo, pero, con el recelo de la pura insistencia cuando en el alma de Alma quedó como el sol o como la lluvia del cielo sintiendo la insistencia del propio corazón. Alma quedó como el cielo expresando con ese sol del parque y cerca de ese lago expresando las más frías verdades de Alma cuando en el alma de ella quedó aferrada a la mala idea de creer en el trance de la verdad en decir todas sus verdades. Cuando Alma y su alma expresan todos los líos a ése hombre sordo, ella queda como automatizando la espera de creer en el destino frío y con el tiempo como el desafío en una comitiva en caer sobre el inmutado silencio de ése hombre sordo con la expresión de Alma confesando los líos en que se mete ella. La vida de Alma quedó como un simple desenlace cuando en el alma quedó como el frío tormento o la fría tempestad cuando en el aire sosegado en el parque bajo ese sol candente quedó como el silencio inmutado en una sola certeza. Alma quedó como el aire irrumpiendo en cada recelo de la fría verdad o como el desenlace de la gélida verdad. ¿Qué hace Alma cuando la luz propia brilla en su propia alma cuando sabe que ése hombre es sordo? Alma quedó como ese silencio automatizado de espera inesperada cuando por salir del trance queda como el capricho exótico en poder observar que el sordo es sordo. Cuando Alma sabe que ése hombre es sordo es cuando comienza a despilfarrar un sólo cometido de caer de bruces cuando el alma socavó muy dentro cuando su alma enciende la luz del alma de una Alma al imperio del silencio cuando creyó estar en el confesionario de un sacerdote confesando todos sus líos.
Alma regresa a la oscura habitación en su hogar que respeta tanto como en esos líos en que ella se mete por inconsciencia autónoma de creer sin el desenlace fatal. Alma regresa a esa fría habitación cuando en el afán de creer en el venidero instante se cuece su alma de luz incierta. Cuando Alma en el afán de creer que su vida queda como queda como el desastre de ir y venir lejos de la pura realidad quedó todo como la débil expresión de Alma ante un hombre sordo. Alma quedó como un suburbio de creer en el alma con toda luz en el corazón una sola razón perdida ante el caso de creer que su única expresión no la escuchó el hombre sordo que ante él le confiesa todos sus líos a ése hombre sordo sentada en el banco del parque. Alma quedó atónita, estupefacta y anonadada cuando en el trance de la verdad quedó como el alma muerta de espantos cuando en el ocaso se llenó de única verdad y fue que el hombre sordo no escuchó nada de la fría confesión de Alma ante un hombre sordo. Alma quedó como el dolor intransigente e indeleble cuando en el afán de saber que el hombre era sordo, pues, su rumbo y dirección quedó automatizado de espera inesperada. Alma quedó como una joven sin destino, sin rumbo y sin dirección fija. Alma quedó como el trance reflejando en el espejo del alma cuando en el ocaso en ese parque del hermoso lago junto al hombre sordo quiso aferrarse a la idea de caer y confesar todos los líos en que se ha metido Alma. Alma quedó como el instinto forjando la pura verdad que conlleva una sola razón inherente cuando en el trance de la verdad queda Alma con el dolor en sus entrañas abiertas por conocer la vida y más que eso conocer que al hombre que le había confesado todos sus líos era un hombre sordo y que no escuchó lo más amargo de su existencia con esos líos en que ella se mete. Alma se mete en el ambigüo porvenir en que el sentido se cuece de voluntad inherente cuando en el alma queda como Alma sin sentido adverso que al que le había confesado todo era un hombre sin tener audición. Alma quedó como el sentido sin sentido cuando sus oídos sin escuchar están y todo porque en el aire socavado queda como el dolor de haber expresado y confesando sus líos sin saber que era un hombre sordo. Alma regresa a esa oscura habitación donde el alma quedó con luz propia socavando en el trance de la verdad una sola expresión en confesión. Alma quedó con un sólo dolor y se dijo que nunca más irá ni a la plaza ni al parque para hablar y desquitarse con sus confesiones a nadie. Alma quedó como el dolor inerte socavando en un deleite transfigurado de transmutación cuando quiso que alguien escuchara sus más terribles líos, pero, en los líos en que ella se mete es inherente de saber que la verdad queda como el deleite universal en dar con toda salvación la vida inerte en seguir y proseguir con líos o sin líos. Alma quedó como el mal deseo de ver al cielo con sol o con lluvia mojando sus sentidos con la fuerza de la propia luz. Alma quedó como el incierto porvenir cuando pudo saber que el hombre era sordo, sí, como el confesor de todos sus líos. Alma quedó como abrir y cerrar la vida y como la vida en un desierto mágico en saber que la vida comenzó a despilfarrar magnificencia autónoma de todos los líos habidos y por haber de la joven Alma. Alma quedó como la mentira funesta en dar una sola virtud cuando ocurre lo que transcurre una sola mala idea de ver en el corazón una mala insistencia. Alma corre a ser como la fuerza de voluntad cuando cree que el desierto frío es gélido como el mismo hielo o como la misma nieve fría en el camino y en el suelo.
Alma va desafiando la manera más vil y más cruel de todos los tiempos cuando ocurre lo peor en su corta existencia. Alma se dirige a visitar a un doctor en cuestión de creer en el capricho exótico que posee una enfermedad llamada la luz de Alma porque enciende la luz cada vez que se va a meter en líos. La luz de Alma queda como la vez aquella que encendió la luz en el cuerpo deliberando una luz propia como el recelo de la fría verdad en que el desierto se convierte en transición efímera de caer sobre el mismo imperio cuando la luz está en el alma de Alma. Alma comienza a caer su estado de ánimo en el sortilegio y en el candor de una sola alma cuando en el alma hay luz descendente, pero, en el comienzo de ver al cielo de sol quedó como la órbita lunar atrapando la espera inesperada en una noche clandestina de intranquilidad y con bravío temperamento. Alma en el albergue de su pobre corazón quedó como el abrir y cerrar de ojos derribando y destruyendo la forma de abrir y cerrar los ojos de tiempo. Alma quedó con el dolor en el alma derribando la verdad de ser una sola fría verdad que el tiempo quedó con el dolor en el alma de luz propia navegando en dentro de su propia alma. Alma quedó como el deleite universal de una luz en el alma cuando en el corazón oscurece de todos los tiempos como su alma fría queda como la luz propia de un brillo de su alma sin destino. Alma quedó con el alma fría cuando en el afán de asistir a un doctor por el dolor de la luz en el alma quedó con el dolor frío de entretener la frialdad en contra su propia voluntad. Alma se mete en líos con ése doctor cuando en el afán de creer en la luz de Alma fría y tan álgida como el poder de sentir la enfermedad de la luz del alma. Cuando en el alma de Alma sucumbió en un dolor sin ser pasajero sólo esperó por un momento en que el tiempo y el deseo en meterse en cada lío o bochorno con gente desconocida se enfrío el tiempo como el hielo o como una nieve caída en el suelo. El doctor a Alma la asiste como de costumbre y la chequea como siempre, pero, esa luz en el alma es una luz mágica que ella sólo sabe cuándo encender como el tiempo o como el recelo de la sola verdad en que el tiempo y la verdad se aferran a la idea de convertir la razón en el tiempo y más en el ocaso muerto de espantos cuando se aferra a la vida cuando en meterse en líos es lo que más le gusta y le agrada a Alma. Alma con el doctor le da direcciones y rumbos dónde está esa luz propia que ella le expresa que posee cuando en el alma se aferra a la idea de creer en el alma a ciegas cuando en la ceguera se cree que en el tiempo y más en el combate de esa alma con luz propia que desciende hacia la forma y manera de creer en el alma a ciegas con una ceguera inerte que asciende hacia la cúspide. Y Alma cree en el desierto frío y tan mágico de meterse en líos desde el principio automatizando la espera inesperada de creer en el tiempo como una sola mala alma que queda como el viento pasando de lejos y rozando el cuerpo como ese viento que hoy no le incorpora en el alma una sola sensación. Alma con el doctor se dirige dándole direcciones de cómo tratar a su alma fría y llena de luz propia en ese cuerpo que se ha metido en muchos líos y los que no se cuentan. El doctor mira profundamente a Alma a sus ojos llenos de luz y le expresa directamente que… -¨aquí el doctor soy yo y usted no tiene nada más que el miedo al dolor de meterse en líos y por eso su alma se asusta, vaya con un psicólogo que lo que usted tiene no es luz propia de su alma sino una confusión entre el alma, mente y conciencia…¨-, Alma quedó anonadada, estupefacta y atónita si nadie le había hablado de esa manera cuando ella entendió y ¿qué hace Alma con ese gran lío con el doctor?, pues, ella sólo quiso ser como el sol o como la estrella en el cielo brillar con luz propia, pero, no sabe cómo lograr ver a su propia alma.
Alma ve y siente que está sin luz propia cuando en el acecho de su propia voluntad no mira ni observa a esa alma con luz propia. Alma quedó como el recelo de vida y con la luz propia, pero, muy opaca y tenue y sin saber que en el día se siente como el suave delirio en querer socavar en el trance directo de creer en el alma sin la luz que emana. Alma se debe enfrascar a la idea de que el tiempo corre como la luz que emana desde su propia alma, pero, con la idea de entrever que la razón se pierde con el tiempo. Alma siente que su alma tiene la luz tan opaca en que ella siente que pierde la luz de su propia alma cuando oscurece el tiempo y más su cuerpo de luz tenue y tan opaca en creer en el alma clandestina de creer que su alma va y va en creer que el tiempo no caduca como expira la fría verdad de sentir la fuerza, la vida y más la verdad de creer en el alma con la plenitud en fortalezas de esa luz propia que enciende más a su alma. Alma creer en perder a la luz de su alma cuando en el combate de solucionar el débil problema se debe a que el silencio de su alma sin la luz ya que emana de su propia alma se fue de ritmo, de vida y de virtud automatizando la espera inesperada de creer que su alma es fuerza y voluntad cuando en el tiempo ciega a esa luz propia con el mal tiempo, tempestad o tormenta. Alma queda como la bondad rica en nutrientes abasteciendo a su alma de luz propia, pero, en el trance del recelo de la verdad queda automatizando la idea y la espera como esperar a que se borre indeleblemente esa luz propia de su alma. Alma inicialmente quedó con el temor de esa alma llena de luz cuando su voluntad se aferra a la idea de que esa luz se desaparece de su alma y de su vida para no meterse más en líos o bochornos que, al fin y al cabo, se dedican en ser como el dolor o como el capricho exótico en creer en el recelo de la pura verdad de que casi pierde la luz de color blanco de su propia alma. Alma se llenó de rico placer cuando su alma quedó como el suburbio o como el recreo de la verdad en el alma como que el silencio automatizó la espera desesperada en el trance directo del rumbo fijo en el alma desierta como una sola verdad que aflora la pureza de la cruel verdad en que la luz propia desciende hacia el más cruel y el más nefasto de todos los tiempos. Alma quedó sin luz en el alma, cuando se dio cuenta que el alma aflora luz de la verdad y que su alma posee luz porque está viva y que su alma depende de ella cuando en el alma hay luz propia de alma. Alma se dio cuenta que su alma oscurece como el tiempo o como la más terrible tempestad o como la tormenta fría en querer solventar la fuerza en querer esa luz, otra vez, en su alma llena de luz propia para que el ritmo de la vida, del amor y en meterse en líos y en problemas o bochornos se aferra a la idea de creer que Alma posee la luz propia como poder ser la señal de combate de caer siempre en líos. Alma quedó como la vida y con luz propia en querer soportar que esa luz desee meterse, otra vez, en los más líos efervescentes de todo los malos tiempos. La vida oscurece para Alma, y con ella la luz propia de su alma, cuando en el afán de creer en el desierto fastuoso y mágico cayó en una única redención de ver al cielo o al sol o a la estrella en el cielo con la misma luz de su propia alma abierta a los sentidos mojados por la misma lluvia que socava dentro de Alma. Alma quedó automatizando la espera en un cruel infortunio delicado como el tormento de creer en la luz propia de su alma cuando en el recelo de la verdad quedó Alma con una total oscuridad desierta dentro de su cuerpo y más de su alma. Alma quedó con rumbo y dirección fija cuando ella logró salir de ese trance depresivo que le dió el tormento y la cruel tempestad de fijar un rumbo con luz propia en su alma.
La vida de Alma quedó abatida y en crueldades de sentido sin sentidos cuando la lluvia moja sus sentidos y más su eterno corazón de sensaciones en sensibilidades innatas. Alma por salir de ese encierro en que con autocontrol se impuso ella misma en su vida quedó autorizando que la luz propia de Alma quedó en plena oscuridad desde que ella entendió que la luz emana del alma y que no es una luz para meterse en líos como ella creyó. Alma por salir de esa oscura habitación volvió a brillar la luz propia de su alma cuando por fin observó a un hombre sentado en aquel banco del ¨mall¨ y fue para allá a conversar con él y que quizás en meterse en líos cuando su alma logró salir de esa habitación oscura y sintió que se mete en líos por tan sólo ser una joven de quince años con ser superlativamente una joven en que se mete en líos cada vez que observa a su alma con la luz de Alma aflorar por sus propios ojos con luz de la de verdad.
FIN