Rosario_Bersabe

La muerte es una diadema

La muerte es una diadema

que a todos ciñe algún día

es como una mano fría

que con su tacto nos quema.

Nadie comprende su lema

cuando el frío hálito exhala.

Su guadaña nos señala

sin distingo por edad

por vileza o por bondad,

no atiende a guía ni a escala.

 

La muerte acecha escondida

en su nido de serpientes

bien afilados sus dientes

para arrancarte la vida.

Saliendo de su guarida

llega como un vendaval.

Te enmaraña en su espiral

y con sus garras de acero

corta con golpe certero

tu cordón umbilical.

 

La muerte, ardorosa lava

que con encono arremete,

es un áspero estilete

que en las entrañas se clava.

Nos escarba y nos socava

como una experta labriega.

Siempre gana en la refriega,

de sus garras no escapamos

y por mucho que vivamos

nos sorprende cuando llega.