pasaba

Exilios

Eres un país que camina, arrastrando una lengua de exilio. 
Mis ojos se hundieron en bosques y montañas y dejé mis  huellas enterradas bajo el humo. 
Nuestras sombras respiraron juntas y todos los paisajes nos contenían. 
De tu historia, hice la mía. 
Bebí todas tus penas en mis pozas de alegría. 
Parte de sombra parte de oro, tu cielo yo recorría. 
Cómo podría alejarme de tu reflejo si has dibujado  conmigo todos los abecedarios y el calendario del después. 

P Sabag, palabras escapándose