marha san antonio

LA HUELLA

Serpentea un camino gris
de ancho y profundo matiz
a su vera agobiado y cansado
avanza cuasi  contando
sus pasos y sus pesares
entre rictus de amargura
y la faz de melancolía 
un ser de duelo febril.
Quiere apresurar la marcha
tan quedo tropieza y cae
levantarse al rato no puede
asirse de algo no halla
casi de hinojos se pone 
 llevando redor la mirada.
Caminantes van a su paso 
Ignorando lo que ven 
Indiferencia que mata.
Una voz por dentro le dice 
“Levántate , camina y sigue
tu caminar  aun no termina
no pagaste tus cuentas 
y es duro dejar la huella”
 Aquejadumbrado y sin fuerza
se iergue y retoma la ruta
Hay fuego en su entraña
Esperanza en  su sonrisa 
aun  tiene que saldar
lo que a la vida debe.
No hay deuda que no se pague
No hay Plazo que no se cumpla
Ni cuerpo que la resista
Lo que temprano no pasa
aunque tarde pero llega.
Así es el  andar del peregrino
en los vericuetos de la vida 
entre destellos de alegria
y sordo y retumbante clamor
va marcando con cada paso
la huella que será la guía 
de su postrer linaje de honor.