Carlos Eduardo

Laureles de oro poetisa

Advierte, Sancho -dijo don Quijote-, que el amor ni mira respetos ni guarda términos de razón en sus discursos, y tiene la misma condición que la muerte: que así acomete los altos alcázares de los reyes como las humildes chozas de los pastores, y cuando toma entera posesión de una alma, lo primero que hace es quitarle el temor y la vergüenza

 

¡Qué alma más bella tienes!,

a tu lado los soles empalidecen,

la brisa acaricia menos,

la lluvia llovizna,...

eres la más hermosa,

fragante,

sutil de las rosas;

 

la poesía se enaltece,

los laureles de oro

y de diamantes

te sientan bien,...