Poeta al atardecer.

LOS QUE NUNCA MUEREN.

  LOS QUE NUNCA MUEREN.

 

Camino los recuerdos por adoquines,

con voces combativas de la lucha obrera,

vestíamos las calles color de primavera,

con sueños impresos en folletos y pasquines

Nuestra lucha eran serios y delicados fines,

queríamos no fuera el té alimento del lactante,

la leche del compañero era tema constante,

para detener el alto índice de muerte infantil,