… Y en la noche, una lágrima, asoma,
Brilla en la oscuridad, no hay olvido…
syglesias
Presenta
Del ciclo de la Vida en Parejas…
Ya no pienso en ti, pero sonándote te he llorado – De la vida:
“A veces, la vida, dice, una lágrima, no seca el viento,
Si el amor al no morir, no conocerá nunca el final.”
Ya no pienso en ti, pero sonándote a veces te he llorado,
El inconsciente, dice, fue tanta la distancia entre los dos,
Que así despierto desee poder olvidarte es un imposible,
Imposible, de saber qué ha pasado, que con indiferencia,
Yo tampoco lo he logrado, ya son muchas las ocasiones,
Que sin razón aparente, me he desmoronado, llorándote,
Llorándote, dando cuenta, que aunque crea, no sentirte,
Sigo, sufriendo internamente el quererte, no ha acabado,
El amor al no morir, no conoce final, así mucho, deseas,
Deseas, mirar para otro lado, pero hay algo que es dolor,
No te veo como antes, pero la tristeza, sigue, estando ahí,
Marcando pauta, mayormente las noches, sin un, por qué,
Por qué, permaneces en sueños, que son de amor, sin ti,
Aquí, al lado a la cama, no estás cuando más, te necesito,
Eres el peor, castigo porque sigo llevándote dentro de mí,
Mi, corazón, desde hace tiempo, no late, por tu corazón,
Y a pesar de no pertenecerte, tampoco, logro, ser de otra,
Soy un preso encadenado a sueños, que son puro, dolor,
Dolor, demostrándose, cada amanecer con el despertar,
Que será inútil, tratar de escapar, huyendo a la realidad,
Tú eres, así no lo desee sintiendo, la razón de mi existir,
Existir, por más que del ayer medité, no pude, entender,
Logrando, comprenderte, por qué, no notaste esa noche,
Mi presencia, sincera, frente a ti, quedándote en silencio,
Silencio, que a la larga nos separó, siendo esta desilusión,
Y fracaso de la relación a tu espalda del desdén y olvido,
Si vivir contigo era como vivir sin ti en verdad, no puedo,
No puedo, por lo que en un principio, pensé, así, sería,
Sintiéndote de otra, forma, por manera de ver y querer,
Siendo una falacia, que en verdad, no piense más en ti,
En ti, y por ti, hoy vengo a pedirte, que me perdones,
Si debo decirte hincado de rodillas, que igual lo siento,
Estoy, dispuesto a decirlo, porque, eres, Tú, solo, Tú,
Solo, Tú, quien, puede ayudarme a liberar las cadenas,
O condenarme, atado de por vida a recordar en tierra,
Por lo que pudo ser sentido y vivido o no del pasado.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 15/12/2024 08:30 P.M.