Emilio Barrios

Somos polos opuestos

¿Que haría yo contigo? Mis manos sudorosas acariciándote la piel, sucumbiendo en un delirio, imagino.

 

Sé que amarte sería un martirio, pues mírame, ya no puedo ser como lo fui a los veinticinco.

 

Hoy mi forma de sentir, de pensar ya no es la misma; podría amarte, ¡cómo no!, lo admito.

 

Eres hermosa, pero para mí la belleza no lo es todo, ya poco importa, mejor serte sincero.

 

No pretendas que podría estar detrás de ti como un perro; yo no camino por ese sendero.

 

Tu corazón late a un ritmo que no va con el mío; tú crees en el destino y yo hago caso a mi instinto.

 

A ti te gustan las redes sociales, exponerte, ser vanidosa; a mí me gusta el silencio, la privacidad.

 

¿Qué haría contigo si te tuviera conmigo? Tienes a muchos detrás de ti, me comerían los celos.

 

El sexo y el placer son buenos, no lo niego, liberan dopaminas para el cerebro, pero, ¿Qué sería lo nuestro?

 

Entre tú y yo soplan diferentes vientos; a mí me gusta el amor y a ti el dinero, somos \"polos opuestos\".

 

Somos polos opuestos, pero esta vez no somos como esos polos que se atraen; entre ambos todo es distante.

 

Tu cuerpo, tu belleza es una obra de arte, admirable, pero no sabes amar a nadie.

 

Entiéndeme, niña hermosa, sé que buscas siempre a los hombres que puedan venerarte.

 

Luces espléndida con esas ropas al cuerpo que levantas miradas cuando sales, eres elegante.

 

En cambio, a mí me gustan las ropas holgadas, la soledad de mi casa y ni siquiera me gusta usar traje.

 

Busca alguien compatible a ti, a tu estilo; yo no soy para ti, no tomas al amor en serio.

 

A mí me gusta la familia, el calor del hogar; a ti te gusta salir a pasear, coquetear y con todos jugar.

 

Somos dos polos opuestos, somos diferentes, mientras a mi me gusta lo serio, a ti todo te divierte.