Conjugar el verbo amar
es relatar la aventura
que te lleva a la locura,
sin tiempo para pensar.
Desde el principio al final
es de una total entrega,
el amor jamás se niega,
llega como un vendaval.
Son labios apasionados
que se atraen al besar,
hasta llegar a soñar
como dos enamorados.
No admite lo imperativo
al conjugarlo, son dos
que le prometen a Dios
amarse como motivo.
Procura endulzar palabras,
pues cuando toque tragar,
tendrás que saber libar
y que no sepan amargas.
Classman