Sin duda soy un adicto a los embelesos
que emergen desde tu alma y que seducen
a mis sentidos... y el efecto que propician
en mí es el afán de liberar mis voces,
gracias por este arrebato que a ambos
nos induce la avidez de compartir trocitos del alma...
-saldremos ilesamente, lo garantizo, ya que tu luz
con la mía resplandecen-.