Un caminante no cansa de andar,
cómo un poeta que escribe cansado.
Siguen sus metas y siempre han logrado,
dar de la nada su todo y llegar...
Dónde han llegado los que sin ganar,
en los caminos su sangre han dejado
y los poemas que son su legado,
de dos destinos que en vida cruzar...
El improbable de esquivo sentir,
que ha mantenido en sus almas la fe,
para encontrar a su mismo latir...
Pelo castaño y los ojos café.
¡Sean de un par los que puedan vivir
tanto cariño de amor que si fue!
Autor. Mario Rodolfo Poblete Brezzo.
16 de Diciembre del Año 2024.
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