Jorge L Amarillo

Hallando las letras...

Convertí a mis lágrimas solo en un gran dolor
para hundirme más y más en la tristeza,
deje que el tiempo me dividiera por dos
y disimule mi presente solamente por fuera.
 
 
Me encontré aquí con mi desolación
con trozos de mis ilusiones ya deshechas,
con la nostalgia moviendo a mi imaginación
y mi sombra jugando con oscuridades siniestras.
 
 
Un espejo me devuelve a quien no soy
quizás porque el espejo no ve a mis miserias,
giro en un mundo lleno de meditación
donde el silencio es una voz que se manifiesta.
 
 
La melancolía me ofrece toda su adicción
mientras el viento va recogiendo mis penas,
mi destino elegido fue el de un perdedor
donde tal vez las lluvias puedan borrar a mis huellas.
 
 
Impregnado de soledad estoy donde estoy
alimentando a mi alma con un juego de quimeras,
mi felicidad abruptamente terminó en frustración
y mi pensamiento muere, ya falto de nuevas ideas.
 
 
Equivocado o no me gana esta cruel decepción
estoy como una flor muy lejos de la primavera,
estoy tan incierto sin rumbo ni dirección
con hambre de recoger las cosas del ayer tan añejas.
 
 
En este laberinto invisible donde me he perdido yo
no existen ayudas para poder ir abriendo las puertas,
donde la salida está en manos de la intuición
en un juego donde yo no impongo sus reglas.
 
 
Todo va pasando al ritmo de mi respiración
como va pasando el ayer sobre la misma ausencia,
y un poeta al que le doy un poco de inspiración
para hacer sus versos, en mí dolor va hallando las letras...