Al bosque de mis cabellos quiero invitarte mi alma
para recorrer caminos que esperan por tu dulzura
densa cascada cobriza que desciende por la espalda
donde se ocultan secretos que despertaran las ansias.
Ven arrulla las palomas, recorre la piel desnuda
libera los mil demonios que por la sangre circulan
dibujando el cuerpo entero con fantasías y ternura
Y que la pasión se encienda hasta perder la cordura.
Exploremos los senderos las llanuras y las grutas
donde manantiales brotan en cristalina frescura
desliza tus sabios labios sobre las firmes caderas
y traspasa la frontera de ese húmedo jardín
donde duerme un colibrí bajo la rosa más tersa.
Perlas corren por la piel en tórrido atardecer
en la cadencia ancestral gime el alma al renacer
dulce aroma de canela, brota un manantial de miel
lecho de flores silvestres, cabalga piel sobre piel
Y en el misterio del bosque juega el duende del placer.