Federico Mendo Sánchez

TRISTE NAVIDAD

 

 

Ya llegó la Navidad y también llego la fiesta,

hoy es Noche Buena y nos trae emociones,

mejor que el dolor se quede haciendo siesta,

y esta noche empecemos sin vacilaciones.

 

Navidad, es emoción, es también espera

del hijo que no llegará pronto para la cena,

y aunque esa madre con su dolor se aferra,

hoy un buffet de amor pondrá sobre la mesa.

 

Y sé que muchas también harán lo mismo,

cuantas madres con el alma extasiada,

van pidiendo plegaria a Dios por el camino,

un pan para su mesa en esta Noche Buena.

 

Mientras algunos muy llenos de placer gritando,

caminando van por la calle abarrotada de gentío,

una limosna señores alguien pedirá llorando,

es una madre y un niño que va muriendo de frío.

 

Pero que Navidad tan triste para esa mujer valiente,

ahora en esta vida el pobre solo espera la muerte,

la madre abriga al niño con una mirada inocente,

¿acaso Dios le ha destinado vivir esa triste suerte?

 

El niño cierra sus ojos, se calla la madre un instante,

eleva su mirada al cielo con tristeza y suplicando

dice: - una limosna señores para comprar un calmante,

mi niño está muy enfermo, mi hijo está agonizando.

 

Pasan uno y pasan dos y le echan solo una mirada,

la madre rompe en llanto, pues su hijo lo ha perdido,

que Navidad es Señor para esa madre abnegada,

se quedó mirando al cielo, pues nunca llego su pedido.

 

Que Navidad para triste que el mundo nos ha entregado,

ya no hay amor ni respeto, todo en la tierra ha cambiado,

dime, pues divino Dios ¿si a este mundo tú has creado?,

perdóname si te he ofendido, perdóname si te he fallado.