Francisco Javier G. Aguado 😉

Aullando tu recuerdo

Araño mi pecho ardiente
buscando aplacar mi pena
indultando la condena
que arrastro siendo inocente.

Surgen reproches hirientes
que a tu vera me encadenan
aullando a la luna llena
como animal penitente.

Dejas mi alma partida
como del mal renacida
y abocada a las tinieblas.

Me duele tu indiferencia
disfrazada de inocencia
y repleta de miserias.

              ***
Deja que sane mi herida
las noches de luna llena
deja que llore mis penas,
deja que viva la vida.