Rosario_Bersabe

TRISTE NAVIDAD

Andando por la calle, en mi ciudad,

me topé con los ojos de un chiquillo,

una mano metida en un bolsillo

y la otra suplicando caridad.

 

Señor, señora, tengan la bondad

falta de todo en nuestra humilde mesa

y a mi madre le hice la promesa

que tendría comida en Navidad.

 

Abrí el bolso y le di por compasión,

tres miserables euros solamente

¡Cuánto reproche mientras los tomaba!

 

La culpa laceró mi corazón

viendo cómo el chiquillo se alejaba

contando las monedas tristemente.