Esto
de las distancias
es una lástima
pues te busco en mis alrededores
en figuritas de árboles
y sería bueno mencionar
un bosque de tonos oscuros
como tus ojos,
tus cabellos
y la elegancia fúnebre
de mi momento,
pero sigo atenuado,
triste,
agitando la mente
de un pensamiento
para otro,
raramente
todo es pacífico
y ordinario,
pero viene de nuevo
la colisión,
las paredes
llenas de excremento
de parvadas
y otras locuras,
como la de dibujarte
justo enseguida de mi almohada
o pensar tu cara en el techo,
y de nuevo todo
es abstracto,
límpido,
adherible
a mis entrañas;
la melancolía succiona,
mi cuerpo seco.
Esto de extrañarte
es una demora
del suicidio,
¿lo notas?,
te espero,
aunque me consuma
igual de fácil
igual de ejemplo
que el tono célebre de la vida,
que el cigarro inmortal del abuelo.
BryanGómez.