Como un barco en la niebla
recorro tu mar surcando las grandes olas
de tu sexo, embravesido tramo tras tramo
a la deriva en los pasajes de tus ríos salvajes.
La perfectaa tripulaciòn, al igual que bandadas de pájaros,
tus gemidos encallan en la orilla transformandonos,
la luz de la vela nos va mostrando el camino,
hacia la pasión que atadas
crucificadas, rendidas al altar,
ferozmente se extingue y nuevamente
renace con más fervor,
convirtiendonos en dos barcasas encalladas
en el mar de la pasión.
Eva Estella Parejas Manzanal
Silvia del valle Suarez
mr