Marcos Magallanes

Mi piel es la vastedad misma...

Mi piel es la vastedad misma.
No acaba acá donde mi piel, ahora.

Mi piel se extiende silenciosamente
como inconmensurable que abarca,
como presencia huérfana,
testigo de sí misma a través de sí;
adoptando todas las formas.
Cuando miro las cosas
descubro que soy yo quién se mira a través de las cosas.
Mi piel es una extensión legítima de mi naturaleza absoluta,
un mito infinito que todo lo puebla
que todo conecta
en su fina trama de boceto indescifrable.
Mi piel es la existencia misma siendo,
girando en formas que se solapan,

que reaccionan en la sinfonía ineludible del caos
que es mi misma piel, desde fuera.
Mi piel es la omnipotencia del cosmos
herido de muerte, de entropía herido
condenado a la soledad perpetua
fragmentado, falsamente fragmentado
en abreviadas partes que piensan,
que sienten, gimen, mueren (nunca mueren) y esperan.