En un tiempo sin orden ni rangos
se cancelan opiniones y se masacran fetos
cada quien cultiva su propio mundo
no hay vínculo real, no hay realidad
cada quien parasita del otro, sin culpa
se riegan empleos, se empañan ojos
estamos inquietos, somos todo problema.
En un tiempo sin rango ni orden
no hay personas, tampoco líderes
nadie es el Papa, nadie es Jesús
hay un fraude en el alma,
porque no hay realidad posible
y cada quien hace de sí un parásito.
Oye chica ¿Puedes ayudarme?
Estoy demasiado ocupado
tratando de moverme
y buscando hacer alguna cosa
nadie es el Che Guevara, nadie es Jesús
por lo que nada se puede hacer
más que la imprecación contra el espejo
y la palabra carente de carne.
Se escuchan proclamas, se registran rostros
se coleccionan miembros
mantenidos en alcohol
a todas luces, no hay visión, no hay señal
solo un enorme tumor
carcomiéndonos por dentro
un abismo ineluctable, lleno de apetito.