El rico al pobre convence
que del oro será dueño
pero solo será un sueño
del que tarde, se despierte.
El rico amasa fortuna.
«Cuanto más tiene, más quiere».
Con engaños él adquiere
sus riquezas, más espurias.
Les dice: habrá beneficios
que resuelvan la pobreza
pero esconde, con vileza,
que se engordará el bolsillo.
Siguen dándoles espejos
a cambio de todo el oro
que se embolsan sin decoro...
¿Por qué habrá tantos zopencos?
Al rico nada le importa
destruir el ecosistema
que genere más problema
a la vida, aquí y ahora.
Piensa siempre en su riqueza
su ambición es infinita
a los pobres, todo quita,
la historia así lo devela.
Y… ¡Cómo cuesta aprender!
Pues la historia se repite
la ignorancia lo permite
y también tanta mudez.
Pero siempre son astutos
disfrazando la verdad
en fiestas de Navidad
con Decretos tan absurdos...
¡Pasen Feliz Nochebuena!
Ya vendrá la luz del día
que, al pobre, la minería...
¡Traerá mayor pobreza!