Todo lo bello…
proviene de ti,
amado Padre,
pero lo más bello,
es tu hijo
¡ Jesús !
Rey y Señor,
de nuestras vidas.
Te entregamos
nuestro corazón,
en honor a quien,
en aquella ocasión,
entregó su vida,
por amor a nosotros.
Eres nuestra verdad,
nuestro camino de luz,
camino de vida.
Te amamos Padre,
Te amamos Jesús,
Te amamos Espíritu Santo.
Que tu misericordia
nos acompañe. Amén.
© Saulo García Cabrera.