Se marcha el año entre luces vuela en el corcel del tiempo
entre algarabía y brindis donde ahogar los sentimientos
se declara fugitivo, rompió las reglas del juego, ya sabes
es un convicto que ha burlado los acuerdos.
Por callejuelas perdidas escapa de pueblo en pueblo
aunque el corazón se duela nada podrá detenerlo
avanza en la madrugada jinete de luz y fuego
secuestro las ilusiones, las esperanzas, los sueños.
Gime el año en despedida, marcha camino a lo incierto
lágrimas que va enjugando sobre su inmenso pañuelo
solo estrellas y luceros conocen su desconcierto
retornando una vez más la magia de los recuerdos.
Aroma de salvia al fuego, la calidez de los besos,
aquella mirada dulce, el aroma de cerezos, amor,
qué cosa es amor, resplandor que duerme lejos
el año se desmorona quiere regresar, no hay tiempo.
Toma un camino de nubes, para tornarse en silencio
revive días de dicha, de celebración, de excesos
también inmensas tragedias que marcaron su momento
el año agoniza, solo segundos da el tiempo.
Ha vuelto la vista atrás, un inmenso desconsuelo
su yo queda reducido al pasado a un numero mas
tan solo la vida es eso, fríos números, silencio
que pena, que desaliento.
En el instante final libera las ilusiones, las esperanzas
los sueños, el año casi sin fuerzas pide un último deseo
que aciertos y desaciertos acordados con el tiempo
descansen en los renglones de algún cuaderno de versos.
Autora
Alexandra
12/26/2024