En mí ya no cabe otro romance
Mil musas llenar mi alma han intentado
El reloj no para y tal parece
Que a ninguna como a ti he amado
Opacar tu recuerdo quise
Sembrando semillas ajenas a mí lo he tratado
De mi piel un jardín para aquellas flores hice
Flores que por falta de amor se han marchitado
Rostros borrosos diviso por la calle
Me recuerdan que brindé calor sin haber sentido nada
En mi pecho ya no queda espacio alguno
Pero sigue esperando tu regreso, tu humilde morada
No estoy hecho para coleccionar corazones
No estoy hecho para repartir mi alma en pedazos quebrada
Demasiadas mujeres me han dado demasiadas razones
Para darme cuenta que a causa de ellas mi esencia yace desgastada