sugeydi Lissbeth Treminio Villalobos

El amor en lo imperfecto

El amor en lo imperfecto

 

¿Y qué es el amor, sino ver perfectas las imperfecciones que carga esa persona amada?

Su cabello cenizo, abrazado por la notoriedad de los años, su panza lánguida, desafiando la fuerza de la gravedad.

Sus ojos rojos, agotados por la pantalla digital, surcados por patas de gallo que anuncian la vejez.

La curvatura de su espalda, cargando el peso del tiempo, del pasado, de la vida.

Huesos largos y extendidos, enfrentándose a la adversidad.

Sus vísceras, un arsenal de maquinaria desgastada, que, con heroísmo, sigue tratando de funcionar.

Cuando el esfuerzo de sus arterias resuena en el silencio, el corazón late con dos o tres pálpitos desordenados, a veces recluso, a veces desbordado.

El hígado, palpable, inflado de orgullo por décadas de arduo trabajo en el paso de los años, el pene, fiel guerrero que aún le hace el gran favor de no abandonar la batalla, la próstata serena, funcional, y sus intestinos, como un viejo barco que sigue navegando altamar.

Esto es el amor: reconocer la hermosura en lo marchito, celebrar lo que el tiempo transforma, y venerar la vida en su cruda y sublime verdad.